Día Mundial de la Población: los argentinos dejan de sentirse jóvenes a los 41 años, según un informe
En los últimos 5 años, hubo un adelanto en la edad en que nos dejamos de sentir jóvenes y nos empezamos a sentir viejos.
A nivel mundial, la gente deja de sentirse joven a los 42 años en promedio (vs. 44 en 2018). Al analizar los resultados en los diferentes países alrededor del mundo, se observan algunas diferencias. En Corea del Sur (52) e Italia (50) los individuos dejan de sentirse jóvenes a una edad mayor que el promedio y que el resto de los países, mientras que en Filipinas (30) y Suecia (34) sucede lo contrario.
Entre los países latinoamericanos encuestados, los paraguayos, chilenos y argentinos se sienten jóvenes durante algo más de tiempo que sus vecinos brasileros, mexicanos, peruanos y ecuatorianos.
Por otro lado, al observar los resultados globales por segmentos sociodemográficos, se registran diferencias notorias según rangos etarios. Los más jóvenes sitúan la pérdida de la juventud a una edad mucho más temprana que el promedio global y que otros segmentos etarios; los entrevistados entre 18 años y 24 años sienten que serán jóvenes hasta que cumplan los 33 años. Las personas entre 25 y 34 años creen que serán jóvenes hasta alcanzar los 36 años, los de 35 a 44 años sitúan la pérdida de la juventud a los 40, los de 45 a 54 años a los 44, los de 55 a 64 años a los 49 y los mayores de 65 a los 54 años. Es decir que, a mayor edad, más perdura la percepción de juventud, y viceversa.
La juventud se desvanece más rápido en Argentina: las personas están dejando de sentirse jóvenes a una edad más temprana que hace cinco años
Al analizar los resultados del estudio de Voices en Argentina, se observa que la edad promedio en la que la gente deja de sentirse joven son los 41 años, en comparación con los 46 años en 2018.
¿A QUÉ EDAD DEJAMOS DE SER JÓVENES? – ARGENTINA
Por otro lado, cuando observamos los resultados del estudio de Voices en Argentina por segmentos sociodemográficos, vemos que no hay grandes diferencias de opinión entre hombres y mujeres, aunque sí se presentan variaciones entre los distintos grupos etarios, al igual que sucede a nivel global. A medida que aumenta la edad, los argentinos tienden a sentirse jóvenes por más tiempo. Los jóvenes de 18 a 24 años consideran que se deja de ser joven a los 33 años; las personas de 25 a 34 años creen que la juventud se pierde a los 37 años; aquellos de 35 a 49 años opinan que esto sucede a los 41 años; las personas de 50 a 64 años sitúan el fin de la juventud en los 49 años; y los mayores de 65 años piensan que se deja de ser joven a los 52 años.
También se registran diferencias en la percepción de la juventud según el nivel socioeconómico de los argentinos encuestados: los de nivel alto consideran que la juventud se pierde a los 46 años (versus 41 en el total), los de nivel socioeconómico bajo sitúan el fin de la juventud a los 41, y los de nivel medio a los 42. Estas diferencias pueden reflejar las diversas experiencias y oportunidades que influyen en la percepción de la juventud.
¿A QUÉ EDAD DEJAMOS DE SER JÓVENES? – ARGENTINA
EL COMIENZO DE LA VEJEZ SE SITÚA A LOS 54 AÑOS
A nivel global, la edad promedio en la que las personas comienzan a sentirse viejas es de 54 años, en línea con los 55 años registrados en 2018. Al analizar los resultados por regiones, se observa que en el continente americano, la región de Oriente Medio y Norte de África, continente africano y en Asia Pacífico la edad promedio en la que la gente comienza a sentirse vieja se sitúa alrededor de los 50 años: a los 53 en el primer caso, 52 en el segundo, 51 en el tercero y 50 en el cuarto. En contraste, los habitantes del continente europeo sitúan el inicio de la vejez a una edad bastante más tardía, concretamente a los 59 años en promedio.
Laos (45), Grecia (46), Malasia e Irán (47 en cada caso) son los países en donde las personas comienzan a sentir la vejez a una edad más temprana, mientras que Finlandia (72) y España (65) son aquellos donde este sentimiento aparece más adelante en el tiempo.
Entre los países de LATAM que fueron parte de la encuesta, vemos que son varios los que se encuentran en línea con la media global en este indicador (Argentina, Brasil, Ecuador y Paraguay), mientras que México, Perú y Chile son los países de la región en donde las personas comienzan a sentirse viejos a una edad más temprana, aunque todos rondan los 50 a 55 años.
Por otro lado, al observar los resultados por segmentos sociodemográficos, vemos que los jóvenes comienzan a sentirse viejos a una edad más temprana que el promedio total, mientras que la percepción de envejecimiento se retrasa a medida que aumenta la edad de los encuestados. Específicamente, se observa que los jóvenes de 18 a 24 años sitúan el comienzo de la vejez a los 45 años, los de 25 a 34 años lo hacen a los 47, a los 51 años los de 35 a 44 años, 57 los de 45 a 54, 62 los de 55 y 64 años, y 69 los de 65 años y más. Es decir que quienes más cerca se encuentran de la vejez tienden a retrasar más el umbral hacia ese sentimiento.
Los argentinos empiezan a sentirse viejos 4 años antes que hace cinco años
En un contexto de percepción de pérdida de juventud más temprana que hace unos años, los resultados del estudio de Voices también muestran que la percepción de envejecimiento se ha adelantado. Para los argentinos, la edad promedio en la que comenzamos a sentirnos viejos es de 54 años, en comparación con los 58 años en 2018. Esto significa que actualmente empezamos a sentirnos viejos 4 años antes que hace cinco años.
No se presentan diferencias de opinión entre hombres y mujeres. Para los hombres, los 54 años marcan la entrada al mundo de los adultos mayores, mientras que, para las mujeres, esta etapa comienza a los 55 años. Sin embargo, existen variaciones según la edad, al igual que sucede a nivel global y que en la anterior pregunta: los más jóvenes tienden a pensar que la vejez comienza antes. Los jóvenes de 18 a 24 años creen que la vejez empieza a los 47 años; aquellos de 25 a 34 años sitúan este umbral a los 50 años. A medida que aumenta la edad, la percepción de la vejez se retrasa: los de 35 a 49 años creen que comienza a los 55 años, y los mayores de 65 años consideran que la vejez empieza a los 63 años.
Por otro lado, también se registran diferencias según el nivel socioeconómico de los argentinos encuestados: los de nivel alto, consideran que el envejecimiento comienza a sentirse a los 60 años en promedio, versus los de nivel medio que creen que ese sentimiento aparece a los 55, y los de nivel bajo a los 54.