¿Incomoda hablar sobre plata en el Día del Amigo?: lo que revela este informe al respecto
Un análisis de la consultora Voices! destaca que, mientras ciertos tópicos fluyen naturalmente en las conversaciones con amigos, otros se manejan con mayor cautela debido a su sensibilidad.
En Argentina, la amistad es un valor profundamente arraigado en la cultura. En el marco del Día del Amigo, la consultora Voices! reveló los resultados de un nuevo estudio de opinión pública que explora la comodidad de los argentinos al discutir diversos temas con sus amigos.
Este informe destaca cómo ciertos tópicos fluyen con mayor naturalidad en las conversaciones cotidianas, mientras que otros pueden generar cierto grado de incomodidad. El estudio muestra que la comodidad para hablar sobre diferentes asuntos varía significativamente dependiendo de la naturaleza y sensibilidad del tema.
Si bien los argentinos se sienten a gusto conversando sobre una amplia gama de temas, algunos puntos de alerta emergen de la investigación. Esta temática toma relevancia por ser una fecha tan especial en un país donde, según Vocies!, 9 de cada 10 argentinos consideran a sus amigos como una parte crucial de sus vidas. Según la consultora, esta percepción trasciende todas las edades y sectores de la sociedad.
Los temas que se evitarán en la mesa
Este análisis destaca que, mientras ciertos tópicos fluyen naturalmente en las conversaciones, otros se manejan con mayor cautela debido a su sensibilidad. Las relaciones personales, las experiencias de vida y las anécdotas cotidianas son los temas que más fácilmente se discuten en el círculo de amistades.
Sin embargo, el estudio señala que ciertos asuntos, como los problemas financieros, la salud mental y las cuestiones políticas, tienden a generar incomodidad entre los amigos. La sensibilidad que rodea a estos temas puede llevar a las personas a evitarlos o tratarlos con mucha cautela, incluso con amigos cercanos.
De hecho, la política y la situación económica personal son considerados verdaderos "elefantes blancos" en las conversaciones. Según los datos, casi la mitad de los encuestados (49% y 47% respectivamente) se sienten incómodos al hablar de estos temas, y 2 de cada 10 declaran que no se sienten nada cómodos cuando estas cuestiones surgen en las charlas con sus allegados.
Los resultados de Voices! subrayan la importancia de la empatía y la confianza en las relaciones de amistad. La capacidad de hablar abiertamente sobre cualquier tema es un indicador de una amistad sólida, pero también es esencial reconocer y respetar los límites personales y la sensibilidad de cada individuo.
Encabezando la lista de temas que ponen colorados a los argentinos están los miedos personales, mencionados por 4 de cada 10 encuestados (37%). Les siguen la apariencia física (31%), la sexualidad y los temas relacionados con el sexo (29%), y las relaciones de pareja (28%), que incomodan a aproximadamente 3 de cada 10 personas.
Además, un cuarto de la población (25%) señala que no se siente tranquila al hablar sobre su salud mental, religión y temas étnicos o de raza. Paralelamente, 2 de cada 10 argentinos (21%) indican que sienten incomodidad al discutir su salud física.
Según Voices!, la edad resulta ser el tema menos tabú entre amigos, con solo el 12% de los encuestados reportando incomodidad al abordar este asunto con sus cercanos. Esto sugiere que, aunque hay varios temas que aún generan cierta reticencia, algunos aspectos personales como la edad se discuten con mayor libertad.
Análisis por segmentos sociodemográficos
En una vista general de los resultados por segmentos sociodemográficos, se observan algunas diferencias significativas. En cuanto al género, se destaca que las mujeres se sienten más incómodas que los hombres al hablar de política (54% vs 43% entre los hombres), y tendencialmente ellos se sienten algo más incómodos que ellas al hablar con amigos sobre su situación económica personal, lo cual podría estar relacionado con residuos de los roles tradicionales de género, en los que el hombre es considerado proveedor.
Al analizar los niveles socioeconómicos, las diferencias más notorias se dan en los temas miedos personales y política, temas sobre los que los niveles socioeconómicos más bajos se sienten más incómodos a la hora de conversar con sus amigos.
¿Qué sucede al ver las respuestas según la edad de la población? La comodidad al hablar con amigos se va fortaleciendo con el tiempo. Al examinar más de cerca las diferencias en las respuestas por edades, se encuentra un comportamiento consistente en el segmento joven. Entre quienes tienen 16 a 29 años, los niveles de confianza para hablar con los amigos disminuyen en casi todos los temas: los y las jóvenes se sienten menos cómodos conversando con sus amistades en comparación con las personas de mayor edad.
En este sentido, destaca la reticencia de los y las jóvenes para hablar con sus amigos sobre su situación económica, con un 58% de ellos sintiéndose incómodos de dialogar sobre sus finanzas personales frente al 40% de los mayores de 50 años.
Por su parte, la incomodidad que genera hablar sobre la apariencia física es notablemente mayor entre los y las jóvenes, con un 42% frente al 24% de los y las mayores de 50 años, tema que probablemente esté ligado a la importancia y a la conflictividad de la imagen corporal en la identidad juvenil.
Además, y contrario a lo que podría suponerse, casi 4 de cada 10 jóvenes no se sienten cómodos/as hablando de salud mental (38%) ni de sexo/sexualidad (36%) con sus pares. También se observa que el 27% de los y las jóvenes no se sienten tranquilos al hablar sobre su salud física con su círculo íntimo. Estos resultados sugieren que, a pesar de que estos tópicos están mucho más naturalizados y visibilizados, y que el acceso a información sobre temas sensibles es mayor que en otros tiempos, todavía se enfrentan barreras significativas para hablar abiertamente sobre ellos.
Por su parte, hablar sobre la relación de pareja genera mayor incomodidad entre los adultos de 50 años y más (35% mencionan estar poco o nada cómodos hablando sobre esto) que entre el segmento más joven (22%).
La edad: determinante en la confianza
Como vimos anteriormente, la edad es una variable clave a analizar cuan cómodo se sienten los argentinos para hablar sobre distintos temas con sus amigos. Y esto se refleja al analizar el Índice que presenta claras diferencias en cuanto a edad, siendo los más jóvenes los que menos alcanzan el índice más elevado.
A medida que aumenta la edad de los encuestados, el Índice de Comodidad en el Diálogo es más alto: mientras que 6 de cada 10 personas de más de 50 años se sienten muy o bastante cómodas comunicándose con sus amigos en casi todos los temas relevados, esta cifra desciende a 5 de cada 10 de las personas de entre 30 y 49 años, y cae a 3 de cada 10 jóvenes de 16 a 29 años. Es decir, hay una diferencia de 26 puntos porcentuales entre los más jóvenes y los de mayor edad.
La incomodidad sobre los temas no es la misma en jóvenes varones y jóvenes mujeres. Ellas se sienten más incómodas hablando con sus amigos de política, de su apariencia y salud física, de sus miedos, mientras que ellos muestran más tabúes al hablar de sexo/sexualidad.
Por su parte, la proporción de Retraídos, es decir aquellos que se sienten cómodos con una menor cantidad de temas aumenta a 4 de cada 10 jóvenes, versus 2 de cada 10 mayores de 50 años.
Los datos del índice muestran una consolidación de la confianza a medida que avanza la edad, de modo tal que es posible pensar en una consolidación de los vínculos de amistad a medida que avanzan los años, lo cual abriría la posibilidad de la confianza para hablar sobre varios temas con los amigos, aún de aquellos tópicos más sensibles.
Constanza Cilley, Directora Ejecutiva de Voices, señala que “a pesar de vivir en una era de mayor apertura y visibilidad sobre temas sensibles, los jóvenes enfrentan una notable barrera para dialogar con sus amigos sobre diversos asuntos personales”:
“La incomodidad al tratar temas como la situación económica, la apariencia física, la salud mental y la sexualidad refleja una desconexión entre la mayor disponibilidad de información y la capacidad de los jóvenes para abordar estas conversaciones en su círculo cercano. Es fundamental comprender y abordar estas barreras para fomentar un entorno de diálogo más abierto y cómodo entre las nuevas generaciones”, cierra.